Esta mañana sonó el teléfono muy temprano, cuando suena así en casa tiemblan. Esta vez no fue la excepción, llamada de Iquitos para mi abuelita Naty. Malas noticias su sobrino Wilson falleció, cerca de Lima, en Huaral donde trabajaba hace algunos meses con éxito.
Si bien nunca he tenido una relación cercana con él, lloré porque a mi mente vino su cara colorada, su dejo charapa, su buen humor y su gran sorisa. Un hombre bonachón. Sus llamadas telefónicas siempre eran bien recibidas cuando mi abuelito Moisés vivía, mi tío Wilson sufría las bromas de mi abue con buen humor, alguna vez confesó con tono charapa que llamaba al tío Moisés porque le gustaban las bromas que él le hacía. Mi abue disfrutaba con esas llamadas y siempre tenía paciencia porque a veces llamaba algo "bebidito". El tío Wilson era cariñoso y agradecido de verdad con su familia. Cuando mi abuelito murió, la tía Ñata (mi abuelita Naty) tomó la posta de esas llamadas. Esta mañana la viejita estaba triste, cabizbaja y llorosa, el hijo de su hermana Inés se había ido.
Mi tía Olga bajó con la noticia a la cocina: “No saben quién ha fallecido”, mamá y yo la mirábamos y como si fuéramos ecos: repetimos ¿Quién?. "Wilson, mi primo el colorado". Sentí tristeza y mis ojos lloraron. Vi que a mami también se le aguaron los ojos. Mi tía siguió repitiendo: “El más bueno de los hijos de mi tía Inés”, mi mami le refuto: “Para una madre no existen hijos buenos o malos”, “Sí tienes razón, pero él es quien más se preocupaba por mi tía. Le había dicho: mamita en noviembre te traigo para que pasemos juntos la Navidad”, respondió tristemente mi tía Olga.
Yo sé que los padres tienen preferencias por sus hijos, y si es así mi tía abuela Inés sentirá muchísimo su partida. También mi tío Jorge, hermano del tío Wilson. Ellos siempre andaban juntos. Yo siempre creí que eran gemelos por lo unidos que se les notaba. Hoy mi familia se entristece por el fallecimiento del segundo miembro de los Padilla, un mes atrás partió otro sobrino de mi abuelita, hijo de su hermana, quién tiene una historia triste de pérdida de hijos. En este instante no recuerdo su nombre.
Tío Wilson gracias por llenar mi casa de alegría en cada una de tus visitas. Tus risas y cariño quedarán en nuestros corazones.
3:00 p.m.
V.C.Y30 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario