Depende de como lo mires

Si reniego sólo conseguiré amargarme el hígado. Mi vida no dependerá del compartamiento de mi familia, no los puedo cambiar. Nadie puede cambiar a una persona, los cambios sólo se dan si las personas quieren. Me entristece el ambiente que se vive en casa, intento ser diferente con ellos y sé que hasta ahora no lo logro. Parece que siempre es más fuerte el poder las diferencias. Hoy amanecí con ganas de no discutir, de no hablar. No me gusta no hablarles pero siempre me echan en cara que conmigo no se puede hablar, yo pienso que eso no es así ¿pero quién no tiene problemas con su familia? y aunque eso suene a consuelo de tontos, es la verdad. Yo no puedo culpar de mis decisiones a otros, he aprendido a ser responsable de las consecuencias de mis decisiones por eso cuando escucho decirle a mi hermana: "Yo regrese porque mi mamá lloraba" no me parece justo que el resto tenga que sufrir su amargura. Yo no colaboro en que ella se sienta bien en casa, quizás desde su punto de vista. Pero de nada vale esforzarme porque para ella siempre seré un fastidio y como esa realidad no la podré cambiar a corto plazo, he decidido hacerme la dura en casa, nada de lo que me digan me dolerá. Eso será difícil pero también siento que no es justo que tenga que soplarme el resultado de otros, ya bastante he tenido durante más de 20 años sintiendome culpable de todo. En esta vida no hay víctimas ni victimarios, cada uno es libre de decidir. Yo lo he hecho muchas veces durante el último año y sé que no me he quejado, llevo las consecuencias de mi vida feliz, sin molestar. Y sé que borrar la imagen de quejona de todos estos años en casa, será una tarea ardua, y me gusta el reto.

Me entristece no hablar en casa pero como no tengo otra opción por el momento me concentraré en enriquecerme interiormente, y sé que en esa búsqueda encontraré el equilibrio para llevarme bien en casa. Ahora me queda pensar que todo es posible, si yo quiero.