Nunca se que decir cuando uno de mis amigos pierde a un familiar, más cuando es uno de sus padres. Esta noche pensaba escribir sobre el día de la madre pero la noticia de la muerte del papá de Julio y Juan Carlos me tomo de sorpresa.
La muerte siempre es una situación que no sabemos como enfrentar, la tranquilidad no es una de las cualidades que se tienen en esos momentos de dolor. Esta noche tenía que estar con ellos a pesar de que mamá no estaba de acuerdo. Yo tenía que estar con ellos, porque no sólo porque son los esposos de Sandra y Maky, mis queridas amigas del cole, sino porque ellos para mí son mis amigos.
Gracias a Dios pude estar con ellos. Mili y Juanca me recogieron, estar con ellos fue bueno. Se les veía tranquilos, sé que el dolor lo llevan por dentro. Mañana será un día difícil pero sé que Dios les dará fortaleza. Desde aquí amigos les digo que oraré por el alma de su papá, por ustedes para que Dios les dé fortaleza y por su mami para que encuentre en la Virgen María el consuelo.
¡Los quiero mucho! Y saben que cuentan conmigo siempre. Así como ustedes siempre se preocupan por mí, yo también me preocupo por ustedes.
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