jueves, 23 de agosto de 2007

Momentos dolorosos


Esta tarde recibí una triste noticia, la mamá de uno de mis mejores amigos esta sumamente delicada, el cáncer que ella tiene se la esta llevando. Es indescriptible lo que siento: tristeza, dolor y fe. Escuchar la voz de mi amigo tan serena a pesar de la tristeza profunda que siento, me llena de optimismo, ¿es extraño? pero en estos momentos de dolor, la Fe que sostiene a mi grupo de amigos, se pone de manifiesto en vez de renegar de Dios, entendemos, o al menos intentamos entender su voluntad. La oración se ha convertido en nuestra herramienta de fe, sólo nosotros sabemos cuan poderosa es, cuan misteriosa y enriquecedora es. Por eso escucharle decir a mi amigo: Nunca me he sentido tan cerca de Dios, es reconfortante porque sé que Dios actua en esa serenidad de su voz.

Los casi 15 años trabajando por Dios y mis amigos muchos más, en Eje ese grupo maravilloso de trabajo que nos dio mucho de los valores que ahora tenemos, nos permiten afrontar este momento de tristeza como una familia, porque así nos sentimos todos: FAMILIA. He llamado a cada uno de mis amigos y todos responden de la misma manera: Hay que orar, es increíble que a pesar que hemos crecido, que ya no existe el grupo que nos permitió conocernos, esa misma mistica y amor de hermanos, hace que nos preocupes el uno por el otro, que nos unamos en oración, que nos sintamos más amigos.


Hoy en esta tarde quiero dedicar mi trabajo, a pesar del malestar físico, dedicarlo para que el Señor haga su voluntad y para que nuestros corazones sepan aceptar esa voluntar con Fe y amor.