lunes, 8 de marzo de 2010

¿Por qué festejar el día de la mujer?


Inicie el día con la siguiente actitud: ¡A mí no me saluden por el Día de la Mujer!, eso son convencionalismos, días marketeros, a la mujer se celebra todo el año. Y por qué no hay un día para el hombre? ¿Por qué celebrarlo?, ¿eso acaso no marca una diferencia entre hombres y mujeres? ¿No lleva años la mujer deseando ser igual al hombre? ¡Y ahora me salen con un día para la mujer!

Así he pensado durante años, por eso cuando me saludaron en la oficina les decía gracias, feliz día para ti, la más pesada, aguafiestas y antipática del Perú. Quizás hubiera seguido así un año más, pero las palabras de la capitana de nuestra selección de vóley Seúl 88, Cecilia Tait cambió mi forma de ver este día. Sus palabras salidas de lo profundo del alma, me recordaron la garra que las chicas del vóley nos dieron al Perú, en cada partido, en cada punto. De niña me levantaba temprano para verlas, y luego al colegio. Ella dijo que la hacía muy feliz el homenaje en vida que les daban, no se había esperado tenerlas baja tierra en jardines de la paz para hacerlo. Quizás ustedes niños de la escolta no saben quiénes somos, pero pregúnteles a sus padres y seguramente se emocionarán con los recuerdos como nosotras nos emocionamos con este homenaje, veinte años después. Porque saben que sudamos la camiseta. Y vaya que lo sabemos, ellas : seis en la cancha era todo el Perú. Y mujeres como ellas nos enseñaron a luchar, a sudar la camiseta en cada cosa que hacemos. Por ellas entendí que significaba sudar una camiseta. Cecilia dijo que ellas después de ese campeonato tuvieron que pasar mucho para salir adelante, seguramente necesidades, sin que nosotras lo supiéramos. Quizás pasaron hambre, pero la buena capitana no lo mencionó. Nos dejo en la memoria sus mates, sus gritos en la cancha, el sudor en sus frentes y la alegría que nos dio a los peruanos que muchas veces la seguíamos con televisores a baterías.


Nunca olvido su paso por la colonial, la emoción que sentí al verlas, yo saludaba y gritaba Cecilia, Cecilia, ella me saludo, claro yo creía que me saludaba a mí. Por eso hoy cuando pude decirle que me emocionaron sus palabras, sobre todo las finales: “Si tuviera que pasar por todo otra vez, si volviera a nacer, elegiría ser peruana”, ella me respondió: “Te gustaron, fueron del corazón”… Me sentí otra vez una niña, la trate de usted, quizás por el respeto que ella siempre me inspiró, ella me miraba, esta vez me miraba a mí y en sus ojos se veía la emoción cuando le contaba que yo la vi pasar por la colonial, que ella me saludó… En fin, emoción infantil. Me tomé una foto con ella para el recuerdo, cuando era niña soñaba con una foto con ella, ahora la tengo y me siento feliz porque se me ha cumplido otro sueño.
En la oficina un bello homenaje con flores incluida termino por conquistarme, por amar este día de la Mujer. Una tarjeta firmada por el Sr. Meier de puño y letra terminó por convencerme que el Día de la mujer es necesario para recordarnos a nosotras las mujeres que eso que hacemos todos los días, de manera cotidiana casi de memoria, inspira a nuestros complementos, entiéndanse los hombres a ser mucho mejores.


Ya no es tanto el día lo que importa sino la expresión de cariño que los hombres, le ponen a los homenajes le hacen a una mujer que les dio vida. Porque sólo una mujer es capaz de crear un ser distinto a ella. Y que a veces por una falla cerebral masculina, se olvidan que una mujer los trajo al mundo.
Hoy felicito a todas las mujeres que saben usar su inteligencia para hacer de este mundo, un lugar más cálido, maravilloso y tolerante.
De ahora en adelante felicitaré a mis amigas del género, sonreiré y aunque no reciba regalos, secretamente me diré: “Vaya es maravilloso ser mujer, vamos a contagiarle a este niño, los detalles que tenemos las mujeres. ¿Qué regalito le puede gustar a este chico?. Y seguramente el chico que reciba ese obsequio, entenderá que en ese regalito hay una enseñanza: No existe mejor día para decir lo que significas para otro, que hoy. Sólo hoy. Si es el Día de la mujer, maravilloso si me das un detalle pero si es domingo o martes y te provoca hacerlo, no te inhibas, no esperes un día calendario en rojo. Sé tú mismo. El mejor día para decirlo es hoy.
11:54 pm
08-03-10

1 comentario:

daniel.nakasone dijo...

Yo creo que lo único útil de estos días es que nos permite reflexionar sobre lo torpe de las convenciones y lo bueno de conservar los sentimientos sin que importen fechas o lineamientos.

La memoria agradecida cuando quiere es más fuerte en reconocer lo que merece ser reconocido.


Saludos, y feliz día, felices 365 días siendo mujer.

Daniel