miércoles, 5 de octubre de 2011

¡Bienvenidos 34!



Son las 3 am, no tengo sueño, debería estar haciendo mi trabajo de la universidad que debo presentar el jueves. Pero este es un nuevo año y elijo hacer lo que me gusta antes de lo que debo.

Estoy sumamente conmovida por los saludos que he recibido desde ayer por mi cumpleaños. Me doy cuenta que tengo mucho amor en mi vida que agradecer, muchas personas que se toman el trabajo de escribirme y desearme un feliz cumpleaños. Por eso quiero darte gracias Dios porque sé que este nuevo año estará cargado de amor.
Estoy agradecida por el año que he terminado porque fue de gran aprendizaje, conocimiento personal y reafirmar lazos con mi familia y amigos, pero sobre todo con Dios. Hoy sé que es lo que quiero. Para no dejarme llevar por una excusa nuevamente, empiezo a escribir, amo escribir y este nuevo año mi blog estará lleno de historias, de sentimientos y toda mi energía para pensar positivo. Confió en que me sigan leyendo y opinando.

Este nuevo año de vida, lo inicio con ilusión como cuando te enamoras por primera vez: esperas solo lo mejor. Así lo espero yo, nada me detendrá en la meta que me he trazado. Nada, porque Dios esta de mi lado.
Hay tantas cosas que dan vueltas en mi cabeza, tantos sentimientos que se avivan en mi corazón siento que el dolor quedo atrás. Hoy sonrio con mi mente, con mi alma y corazón. ¡Qué rico se siente! Soy una mujer completamente nueva, me asombro ante la luz que noto en el espejo cuando me miro, ¿será acaso que el amor ya asoma?
En el último año he recuperado mi costumbre de leer libros de todo tipo y no dejaré de hacerlo. Amo leer, mis primeros amigos los encontré en los libros de casa. Hoy son mis compañeros de camino. Ando feliz como una lombriz porque mi vida se ha ordenado y la claridad llego para quedarse.

Mi cumpleaños me encanta, me gusta que me engrían y este año me dejaré engreir sin roche jaja!!! Mis amigas del cole abrieron las celebraciones patronales con el pre cumpleaños en la bodega el lunes. Hoy me quedaré en casa para disfrutar de un lonche familiar y recuperar la hermosa costumbre de recibir a mis amigos en casa.
Hoy estoy feliz porque siento que Dios escuchó mi oración y que todo llega a su tiempo. Qué certeza dejar todo en sus manos. Abandonarse, confiar, creer son las palabras que me sostendrán de ahora en adelante.

Ahora sí a dormir un poco para terminar mi tarea de la universidad. ¡Qué emoción estudiar!

1 comentario:

zancudo dijo...

Extrañaba pasar por está fascínate arteria donde siguen aún colgadas las metáforas del alfeizar de tú ventana allí donde el amor se cuela por las encías y el dulce compacto se pigmenta con la variación del color de su cuello. ¡Vaya!, sabes que este lector te aprecia muchísimo y Dios tienen un propósito contigo bastante grande ya que él te gesto de una manera especial para ser luz donde camines. Feliz Cumpleaños ah obvio que me guardaste el pastel de chocolate…
Abrazos de Angelito