domingo, 11 de mayo de 2008

Un día de la madre diferente

Los Yong: tres generaciones reunidos alrededor del árbol del que procedemos, el abuelito Lucho
Hoy ha sido el día más hermoso del Día de la Madre, ver a mi mami feliz de tener a su hermano Kike, su papá y su sobrina Alejandra, no tiene precio. Me gusto ver a mi mami sonreir, a veces algo estresada por la hora del almuerzo, era la una y recien empezaba a cocinar. Ya sé es Día de las Madres!!! pero a mí la carapulcra me sale terrible!!! yo fui ayudante de cocina y preparé la huancaína que no es por nada pero me sale rica, aunque hoy me pase un poco de sal. Felizmente a mi familia le gusto.

Volviendo al tema, hoy ha sido una de las reuniones familiares que más recordaré: tranquilidad, buen humor, alegría y un poco de todo: Karaoke, conversaciones de primas (Ale prometo hacer lo que me has acoinsejado, pero epa no me presiones, OISTE Chama!!! je,je), chelas, comida, recuerdos familiares de los Yong y de los Coral, que sin duda quedarán grabados en mi corazón. Por un momento pensé que algún vecino llamaría a serenazgo por el concierto gratuito de mi papi y tío Kike, pero ya va, me deje llevar por la alegría del momento y a la miércoles con los vecinos, total quién piensa en nuestra tranquilidad cuando arman tremenda jarana los fines de semana. Ahora sólo escucho la música del recuerdo que llega del jardín de casa, es papá que sigue disfrutando de su día ja,ja.

Compartir con mi abuelito Lucho todo el día ha sido para mí una experiencia increíble, es bien cierto que yo amo a mi abuelito Moisés porque tuve la suerte de crecer con él, y hoy que tuve la suerte de compartir pequeños momentos con el abue Lucho, me sentí afortunada porque esos momenticos me permiten sentirme conectada a mi familia, a la cual a veces ni veo. Mi hermana Mirtha me dijo hoy que todos los viejitos tienen la misma mirada. Me recuerda a mi abulito Moisés, y es cierto todos los viejitos tienen esa mirada como en el pasado, parece que sus ojos abiertos mirarán hacia atrás. Mi abue Moisés también la tenía, esta tarde aprendí que me viene de familia la inclinación a las ventas. Hoy mi tío Kike me enseño a través de las narraciones de sus vivencias que las ventas son el medio o canal para lograr tus sueños, todo radica en la perseverancia y en no substimar a nadie porque nunca sabes quien puede ser la persona que tengas en frente.

El día termina y mi corazón aún sonrie. Compartir con mis primos pero en especial con Alejandra que es una chama bien chevere, es una chica súper decidida, abierta y sabe escuchar y te anima a que hagas eso que no quieres pero que te ayudará a cerrar círculos. Mi tío Kike es la persona más positiva que conozco dentro de mi familia, y la razón es porque también formó parte de un multinivel, es maravilloso comprobar que la filosofía del multinivel cambia la vida de las personas, escuchar a mi tío hablar de las bondades del multinivel ha renovado mi confianza en lo que yo puedo hacer en este negocio.

Compartir con mi familia ha sido una buena medicina para mi alma, quiero irme a dormir con esos buenos sentimientos.

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