jueves, 5 de marzo de 2009

En mi corazón


Siempre vas a habitar en mi corazón, aunque tú no lo sepas.
Intento huir de ti y sólo atino a dar vueltas en el mismo lugar.
Ya no me importa si me haces caso o no, ahora hago las cosas porque quiero.
Claro sería hermoso descubrir que estas enamorado de mí... Sólo en sueños.

Habitas en mi corazón y en mis pensamientos sin remedio, sin yerbas que me cure del dolor... Bah! no quiero curarme. Seguiré suspirando porque me gustas tal como eres, aunque nunca nos crucemos en el camino.
Sólo atino a verte de lejos, sonreir, aunque tú no veas esa sonrisa,
sólo quiero decirte: Estoy aquí, dejar de ser invisible.
te miro, te sigo, te busco y confio en encontrarte... Me gustas tal y como eres Principito.

1 comentario:

LuisFe ® dijo...

Me encanta. Recuerdo los puntos de vista del pequeño principe con relacion al punto de vista de los adultos.

Hay que mantener vivo ese espiritu de niño.

Es muy necesario en algunas ocasiones.

Saludos